Domingo 20/08
Hoy como el resto de días después de desayunar y coger el par de cosas de constumbre, cámaras de fotos y alguna rebeca por si acaso nos pusimos en marcha para realizar la ruta que teníamos planificada para el día.
Salimos de Ottenhöfen con dirección al Lago Mummelsee que tiene mucha fama por los alrededores y es un sitio por lo que vimos a continuación que los alemanes de la zona utilizan para realizar sus salidas domingueras y los moteros aprovechan las carreteras preciosas de los alrededores para hacer sus rutas, y para muestra un boton, lo primero que encontramos al llegar fue.
Salimos de Ottenhöfen con dirección al Lago Mummelsee que tiene mucha fama por los alrededores y es un sitio por lo que vimos a continuación que los alemanes de la zona utilizan para realizar sus salidas domingueras y los moteros aprovechan las carreteras preciosas de los alrededores para hacer sus rutas, y para muestra un boton, lo primero que encontramos al llegar fue.
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| Monumento a la moto |
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| Panoramica de La Selva Negra |
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| Lago Mummelsee |
Cuenta la leyenda
que bajo las frías aguas del Lago había un gran castillo de cristal rodeado de magníficos jardines. En él habitaba el Rey del Lago y las llamadas Seefräulein o Mümmlein (las sirenas del lago)
Cada mañana, a la salida del sol, éstas salían del agua y bajaban por el valle hasta el cercano pueblo de Seebach. Allí, ayudaban a las familias ya sea cuidando a los niños, trabajando en el jardín, o haciendo tareas del hogar mientras los leñadores y agricultores y sus mujeres hacían lo mismo en el campo.
Cuando la noche empezaba a asomarse subían corriendo de vuelta al castillo y a las aguas cristalinas. Tenían que estar todas en el lago antes de que todo se oscureciera fuera.
Una tarde, en la posada del pueblo había una gran fiesta donde todos los habitantes bailaban y disfrutaban de rica comida y bebida. El hijo de un agricultor, que se encontraba dentro del lugar, vio entrar a las sirenas a la posada, y entre ellas estaba ella, una preciosa sirena de quien se había enamorado... y el sentimiento era mutuo.
Se abrazaron y empezaron a bailar, sin darse cuenta que las horas iban pasando y se echaba la noche encima. Todas las sirenas volvieron de vuelta al Castillo del Lago, todas menos ella, que no paraba de bailar, a pesar del aviso de todas las demás.
Cuando quiso subir ya era demasiado tarde... Su amado quiso acompañarla y llevarla lo más rápido posible al agua, pero cuando llegaron a la orilla se había hecho de noche. Ella supo que iba a morir en ese instante. Se despidió de él con un mágico beso y descendió las escaleras que daban al lago. Él vio como se alejaba aguas abajo hasta que llegó un momento que solo veía oscuridad. Tras unos instantes de calma, una ola llevó a sus pies un líquido rojizo. La sirena había muerto, no llegó a tiempo. Murió por amor...
testo recopilado en internet de la pagina:
https://www.caminandoentrebosques.com/descubre/naturaleza/mummelsee/
Cada mañana, a la salida del sol, éstas salían del agua y bajaban por el valle hasta el cercano pueblo de Seebach. Allí, ayudaban a las familias ya sea cuidando a los niños, trabajando en el jardín, o haciendo tareas del hogar mientras los leñadores y agricultores y sus mujeres hacían lo mismo en el campo.
Cuando la noche empezaba a asomarse subían corriendo de vuelta al castillo y a las aguas cristalinas. Tenían que estar todas en el lago antes de que todo se oscureciera fuera.
Una tarde, en la posada del pueblo había una gran fiesta donde todos los habitantes bailaban y disfrutaban de rica comida y bebida. El hijo de un agricultor, que se encontraba dentro del lugar, vio entrar a las sirenas a la posada, y entre ellas estaba ella, una preciosa sirena de quien se había enamorado... y el sentimiento era mutuo.
Se abrazaron y empezaron a bailar, sin darse cuenta que las horas iban pasando y se echaba la noche encima. Todas las sirenas volvieron de vuelta al Castillo del Lago, todas menos ella, que no paraba de bailar, a pesar del aviso de todas las demás.
Cuando quiso subir ya era demasiado tarde... Su amado quiso acompañarla y llevarla lo más rápido posible al agua, pero cuando llegaron a la orilla se había hecho de noche. Ella supo que iba a morir en ese instante. Se despidió de él con un mágico beso y descendió las escaleras que daban al lago. Él vio como se alejaba aguas abajo hasta que llegó un momento que solo veía oscuridad. Tras unos instantes de calma, una ola llevó a sus pies un líquido rojizo. La sirena había muerto, no llegó a tiempo. Murió por amor...
testo recopilado en internet de la pagina:
https://www.caminandoentrebosques.com/descubre/naturaleza/mummelsee/
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| Rey del lago |
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| Seefräulein o Mümmlein, sirena del lago |
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| De caza, (Foto y liebre) |
Después de dar la vuelta al lago, foto en el mirador y sentarnos un ratito en las mesas del bar para tomar una cerveza.
Ya preparados, refrescados interiormente y exterior ya que la temperatura no era muy allá, nos dispusimos a seguir ruta y nuestro destino era el pueblo de Sasbachwalden, un pueblo viticultor y con muchas flores en sus calles, lo que le hace ser digno de ver y además admirar las constumbres que tienen sus habitantes de poner articulos varios en las plantas de sus jardines
Ya preparados, refrescados interiormente y exterior ya que la temperatura no era muy allá, nos dispusimos a seguir ruta y nuestro destino era el pueblo de Sasbachwalden, un pueblo viticultor y con muchas flores en sus calles, lo que le hace ser digno de ver y además admirar las constumbres que tienen sus habitantes de poner articulos varios en las plantas de sus jardines
Entre paseo y paseo, cerveza y cerveza se nos habia echado encima la hora de la comida, buscamos un sitio tranquilo por los alrededores, que estuviera preparado para pic-nic ya que hoy habiamos decidido comer en el campo.
Terminada la comida y habiendo descansado un poco, nos volvimos a poner en marcha con la intención de ir a visitar la ciudad que tiene la plaza de mercado mas grande de Alemania y su nombre es Freudenstadt, tambien conocida como la ciudad de la alegria.
Plaza mas grande de Alemania
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| Por si se ponia a llover, hacia falta un sombrero |
Ya recorrida la inmensa plaza, ver a los niños mojarse en sus fuentes, decidimos sentarnos en una terraza de las varias que hay para deleitarnos con unos buenos trozos de tarta
Terminada la degustación de este magnifico dulce, al coche y dispuestos a regresar a Ottenhöfen que el día ya habia dado de sí todo lo posible.
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