SÉPTIMO DÍA DE VIAJE - 22 DE JUNIO
Ya hace una semana que salimos de casa y llevábamos hechos algo mas de cuatro mil kilómetros, hoy teníamos por delante la séptima etapa de 500 kilómetros y que nos llevaría hasta Rovaniemi que es donde se encuentra Napapiiri, el pueblo de Papá Noel.
RUTA DEL DÍA
RUTA DEL DÍA
Como casi todos los días salimos del hotel ya desayunados, cargamos la moto y decidimos ponernos los trajes de lluvia, estaba cubierto y chispeaba un poco, pues el poco se convirtió en un diluvio durante casi cuatrocientos kilómetros, Mercedes guardó la maquina de fotos y dijo hasta que no deje de llover no saco las manos de los bolsillos y por consiguiente durante este trayecto no hay fotos.
Después de hacer las paradas necesarias para repostar, descansar y comer, sobre las cinco de la tarde llegábamos al pueblo de Papá Noel, que en invierno puede ser que sea digno de ver pero en estas fechas un complejo turístico normal sin ninguna cosa especial si excluimos que está Papa Noel, Mercedes es una apasionada y si no ya lo vereis mas adelante, donde haya una cosita de navidad hay estará ella mirando y comprando algo.
NAPAPIIRI - ROVANIEMI
CABAÑAS DE NAPAPIIRI
Como de costumbre al llegar al complejo lo primero recoger llaves de la cabaña, descargar moto y aquí hubo que hacer algo especial, tuvimos la suerte de tener una cabaña con sauna seca que nos vino como anillo al dedo, el día había sido metido en agua hasta tal punto que guantes, botas y alguna cosa mas las traíamos empapadas, algunas caladas, aprovechamos la sauna, la encendimos y metimos todo lo que creíamos que necesitaba secarse, y funcionó al día siguiente estaba todo seco.
ESTA FUE LA QUE NOS TOCO
Una vez instalados, listos para buscar la linea que señala el
CIRCULO POLAR ÁRTICO
continuamos dando una vuelta por el complejo
POBLADO INDIO
Viendo que la mayoría de las tiendas debido a la hora ya estaban cerradas, nos tocaba esperar al día siguiente, nos dirigimos a la única que quedaba abierta y que nos tubo entretenidos mas de media hora.
Esta es la puerta que da al despacho de Papa Noel, el hombre también tiene sus horas de descanso y al día siguiente aprovecharíamos para saludarle.
Ya comprada alguna chuchería, visto y tocado todo lo que estaba a mano nos dirigimos hacia el restaurante del hotel dispuestos a cenar, ahora es buen momento para recordar por si alguien duda respecto al idioma, es muy bueno saber todos los idiomas posibles, no para este viaje sino para todos los que realicemos, pero yo soy negado para los idiomas y no hay forma de que aprenda nada de nada, pues hoy en día gracias a las nuevas tecnologías y sobre todo a las personas, sin ningún problema en ningún momento del viaje, siempre logras entender y que te entiendan.
Ya terminada la cena y haber dado una vueltecita para bajar un poco lo comido, dispuestos a descansar que al día siguiente íbamos a ver a Papa Noel.
